Es una pregunta difícil. El año pasado jugué en campos impresionantes, entre los que destacan La Reserva Sotogrande y De Pan. Son campos muy diferentes entre sí, pero ambos me gustaron mucho. De Pan es un campo que existe desde hace mucho tiempo y, por lo tanto, da la sensación de que debería estar ahí. La Reserva es un campo más parecido a un campeonato, en el que se juega de maravilla. Lástima que tuviéramos un poco de resaca de la noche anterior (¿verdad, Tim?), porque nuestro juego no estaba a la altura. Espero volver a jugarlo en 2023 para vengarme.
Mi ronda más memorable del año fue el 8 de mayo, en el Openbare Golfclub Dronten. El campo no tiene nada de especial, pero fue memorable porque era el último día de la competición de la NGF. Ese día, los cinco equipos de nuestra poule aún tenían posibilidades de ganar la competición. Fue una batalla épica, pero al final, por desgracia, no ganamos. En retrospectiva, tenía un putt de 1,5 metros para ganar mi partido de matchplay y con ese putt podría haber ganado toda la competición. Pero, por desgracia, lo fallé. Os podéis imaginar que tardé un par de horas en recuperarme ;-). En resumen, fue un día muy especial ver a todos los equipos luchar en un partido tan tenso.
Para mí, lo más importante es el mantenimiento. Me encanta cuando los greens ruedan bien, con buena velocidad. O cuando los tees de salida están súper cuidados.
Tiene que ser Shane Lowry. En primer lugar, me encantan los acentos irlandeses. Además, no le pega necesariamente muy lejos, pero su forma de tirar y su juego corto son de otro planeta. Por último, me encanta verle y asegurarme de que todavía hay esperanza de llegar al Tour con un par de kilos de más.
Volviendo a la pregunta anterior, creo que el hierro 5 de Shane Lowry desde 215 yardas en el green del hoyo 18 el último día del BMW Championship fue algo especial.
Sabía que tenía que hacer un birdie para ganar. Debía de estar muy nervioso al golpear la bola en ese momento. Si vuelves a ver las imágenes, podrás ver cómo levanta el puño justo después de que la bola caiga en el green. Esas son las cosas que me encanta ver.
Tengo un par en mi lista, uno de ellos es La Zageleta. He oído buenas historias sobre ese campo y parece que voy a jugarlo en algún momento de 2023. También espero poder jugar en Hilversumsche o Kennemer. No los he jugado todavía pero (vergüenza, sé) son campos de la calidad que oí.
Este año voy a intentar alejarme de las instrucciones técnicas. Creo que mi swing está en un buen momento. Sin embargo, cuando estoy bajo presión en el campo, tiendo a ahogarme (por eso también me he puesto el apodo de Capitán Ahogo). Así que este año voy a centrarme más en el aspecto mental del juego. Mi colega Tim me recomendó el libro The Inner Game of Golf, de Timothy Gallwey. Acabo de empezarlo, y tengo curiosidad por ver cómo este enfoque mental puede ayudar a mi juego de golf.
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